Emmi Pikler fue una pediatra húngara con una mirada original sobre el desarrollo motriz del niño. Como madre de mellizos comencé este recorrido porque me conmovió profundamente leer “Movimiento en Libertad” y definitivamente cambio mi enfoque sobre la crianza. Este blog, es la manifestacion de mi necesidad de generar un espacio para compartir con otras madres experiencias, dudas, alegrías y los logros de nuestros bebés.
sábado, 17 de diciembre de 2011
¿Los berrinches son para mi?
Lu ha comenzado con los berrinches y cuando no consigue lo que quiere, se tira al piso, se arquea, gira y llora con un desgarro como si le estuviera negando la vida. Juan anda por el mismo camino y los escasos No que recibe parece ser la mayor ofensa del mundo.
Mis amados Juan y Lu de año y medio están decididos a hacerme saber que están dejando de ser bebés y tal como les invité están disfrutando de su autonomía y libertad. Menos mal que alguna vez leí que los berrinches son parte del proceso de individualización y consolidación de su propio YO, porque de otro modo me sentiría algo frustrada. Cuando comienzan estos episodios, se me activa algún lugar primitivo y pienso con todo lo que le doy, cómo puede ser que por una sola cuestión que digo que no venga éste escándalo. Es evidente que estos berrinches de mis hijos, sacan a la luz a mi propia niña caprichosa que también tengo que manejar.
Pasado ese momento me doy cuenta que la respuesta de mis hijos no es contra mí, que no es personal y que es parte del saludable proceso de crecer. Estoy tratando de aprender a querer y aceptar los berrinches: Entonces lo primero hago es darles la razón: "Entiendo que NO te guste que te digan que No", después explico mis propias razones por las cuales dije que NO -seguridad, cuidado, respeto o lo que fuera- y por último, me quedo cerca acompañando: "Acá estoy cerca tuyo disponible para cuando me necesites, mamá no puede sacarte el enojo pero si estar con vos para abrazarte cuando vos quieras".
Desde que me estoy amigando con los berrinches de mis hijos suceden con menos frecuencia, me siento mas poderosa y pude salir de esa situación rarísima en que caía algunas veces cuando con la intención de querer ayudar a mis hijos a salir de ese enojo finalmente parecía casi pelear de igual a igual. ¡¡¡Como se imaginarán obviamente siempre ganaban ellos y yo quedaba débil inútil a su lado!!!. ¿Como podría ayudarlos a salir de ese estado si yo misma estaba fuera de eje?.
De todos modos, prefiero que los berrinches pasen en la intimidad de mi casa porque cuanto estoy con gente o fuera de nuestros espacios me cuesta más encauzarlos y mi propia niña interna grita: ¡No por favor ahora no!
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Cuanto me alegro de que hayas sabido llevarlo tan bien, y es que con nuestros niños interiores revoloteando no siempre es fácil evitar una rabieta nuestra.
ResponderEliminarA mi a veces me da miedo porque se echa hacia atras en el suelo y si no la sujeto a tiempo puede hacerse daño.
Besitos
Te envidio Lucre! yo aún me peleo con los berrinches de mi bicho y eso que solo es una, es la primera vez desde que nacio que no sé como reaccionar, supongo que me toca crecer como madre y aprender de mi bicho. besos
ResponderEliminarMe encantó tu manera de entender y manejar los berrinches. Las pondré en práctica a ver cómo resulta con mi peque (1) que tiene un carácter de aquellos. Besos :)
ResponderEliminarMuy buena reflexión! Como siempre aportás una manera diferente de ver las cosas. Yo me estoy enfrentando a los berrinches y muchas veces me sentí frustrada... he pensado: no le alcanza? Está bueno esto de "amigarse" con los berrinches y descubrir lo que nos toca en nuestra niña interior, me gustó!! Gracias Lucre. Beso grande!
ResponderEliminarTu postme cae perfecto... mi hija no soporta el "no"... es terrible..pone cara de tragedia, llora y se encarrancha... amigarse con los berrinches es lo mejor, cuesta, pero manejarlos así, con el tiempo, hace una gran diferencia!! Felice fiestas!!
ResponderEliminarBerrinches, etapa más larga de lo que parece! :) al principio no sabía qué postura tomar, hasta que informandome y buscandole la "lógica", llegué a la conclusión que en esos momentos simplemente hay que estar presente, abrazar (si se puede, a veces están muy enojados), pero lo importante es que ellos sepan que mamá está presente incluso en esos momentos... sigue siendo difícil, nunca te adaptás a los berrinches, pero yo encontré mi forma de pasar el momento je y vos con dos, uy, eso debe ser bien complicado! un abrazo!
ResponderEliminarQue identificada me siento!!! Gracias !! pondre en práctica el tríptico jiji.
ResponderEliminarBesos